Ladrillos

6 de Abril

A veces me siento como un ladrillo más en la pared. Una pared que, seguramente esta llena de miles de ladrillos como yo.

He tenido la suerte de contar con la compañía de personas excepcionales a lo largo de mi vida, junto a ellas siempre ha estado presente una voz en mi que quisiera a veces sacudirlos y decir: «¿Por qué sigues aquí? Veo que la conexión especial que tenemos es porque tú eres una persona especial, y no porque yo haya tenido una participación especial en su construcción.»

Mi soledad actual, sí fue construida por mí, ladrillo a ladrillo. ¿Como podría destruir mi preciada creación? Y salir al mundo nuevamente. Cuando ya de por sí, cada paso, cada respiración son una esforzada pelea por sobrevivir, manteniendo a raya las fuerzas que insisten en acabar mi existencia, fuerzas que ante la más mínima oportunidad me devorarían en un segundo, borrando todo rastro de lo que alguna vez fui. ¿Puedo confíar en alguien? Todo somos guiados por nuestro propio interés, o miedo a la represalia, quizás eso es lo que mantiene el mundo en su precario balance.